Institucionalismo:
“Este enfoque (“también denominado teoría del filtro” o “teoría de la selección”), surgió durante los primeros años de la década de los 70, refutando varios elementos de la teoría del capital humano. Sus autores principales son Michael Spence, Joseph Stiglitz, Kenneth J. Arrow, Paul Taubman y Terence Wales.”
“Respecto a las discrepancias de este enfoque con la teoría del capital humano, cabe destacar que el institucionalismo concluye en que la posición social de los individuos repercute en las posibilidades de triunfar en el sistema educativo., de lo que se deduce que la educación no contribuye a la desaparición de las desigualdades iniciales entre los individuos. Ambas teorías comparten que un mayor nivel educativo conlleva a un mayor salario, así como que la educación puede estimular el desarrollo de un país.”(http://nulan.mdp.edu.ar/614/1/rodriguez_ma.pdf)
Michael Spence
Escuela Radical:
“Otra visión sobre la educación, pertenece a los denominados economistas de la Escuela Radical, entre los que destacan Samuel Bowles y Herbert Gintis. Estos autores, aunque asumen el papel importante de las credenciales educativas, no limitan las actividades económicamente relevantes de la educación a las de etiquetar a los individuos, si no que defienden la correlación directa entre educación y productividad. Así mismo, en opinión de los mismos autores, la relevancia del análisis está dada por las oportunidades reales de los segmentos más desposeídos de la sociedad de acceder e incrementar su educación, así como las oportunidades laborales de los titulados, según la posición social.
A través de su análisis, regido por el marco metodológico doctrinal marxista, denuncian cómo el sistema educativo está al servicio del sistema productivo (Moreno Becerra J. L., 1998, p. 48), y explican la manera en que la educación es utilizada como elemento legitimador de la función de control de la fuerza de trabajo y como elemento de la reproducción de la estratificación social. Es decir, los éxitos de ciertos individuos tanto en el sistema educativo como en el ámbito laboral no tienen base alguna en la aparente competencia tecnocrática y meritocrática, si no que responde a ciertos mecanismos de reproducción del sistema de clases de una generación a otra.
Bowles y Gintis, demostraron mediante un modelo de regresiones lineales, la existencia de ciertos factores determinantes de la renta y el estatus ocupacional de los individuos no considerados hasta ese momento.
Dichos determinantes eran el origen socioeconómico, el nivel educativo, la inteligencia, la raza, el sexo…etc.
Para los economistas radicales, la educación permite segmentar la fuerza de trabajo, obstaculizar un proceso de toma de conciencia de clase por parte de los trabajadores, y legitimar, y reproducir el orden del sistema capitalista (desigualdad).
Según estos autores, las decisiones de contratación y promoción laboral no están realmente ligadas a cuestiones de eficiencia, sino más bien que sobre la base de la eficiencia y la técnica, se busca justificar un proceso que sustancialmente es ideológico, político y social, en términos de asignación de roles, jerarquías y desigualdades.”
me encanto el articulo esta buenicimo muy especifico y entendible excelente me ayudo mucho gracias
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